P.T.

Antonio José Jaramillo

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Este notable  varón  se distinguió por  su santidad, elocuencia  y en  el cúmulo   de sus  virtudes  solo  encuentra émulo  con los grandes  prelados  de la iglesia  antioqueña. Fue arzobispo  de Jericó. Allí  paso la mayor  parte  de su vida, entregando  su  sabiduría  al servicio  de esa comunidad  que  lo acogió y vio en este  ilustre  personaje  un verdadero Ministro de Dios, hasta el punto  de lucha  por todos los medios de llevar  a ese pueblo  los restos  del  religioso  una vez  falleció, lo que no hicieron  sus coterráneos.

 

 

Nació el 30  de octubre  de  1.886 en Belmira, zona  urbana  y murió  en el poblado (Medellín),el  27  de abril  de 1.969, sus despojos  quedaron  allí  por cinco  años  y luego  trasladados a Jericó.

 

(Arias Restrepo, 1.999)